Desde el balcón del Palacio Nacional, el recién juramentado jefe del Estado salvadoreño, Nayib Bukele, sostuvo que, durante sus primeros años de gestión, el problema de las pandillas era lo más urgente que su gobierno debía controlar pero, aseguró que en su segundo mandato, la prioridad será trabajar para mejorar la economía del país y de la población.
“Ahora que ya resolvimos el problema más urgente que era la seguridad, vamos a enfocarnos en lo más importante, empezando por la economía, pero quizá también haya que tomar medicina amarga para curarse”, destacó.
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Bukele afirmó que, tal y como se implementaron políticas para tratar el problema de las pandillas con una receta eminentemente nacional, su gobierno tomará las decisiones necesarias para sacar adelante al país en materia económica.
“No estoy aquí para hacer lo que algunos creen que hay que hacer. Estoy aquí para hacer lo que sea mejor para nuestro país”, sostuvo el mandatario ante jefes de Estado y representaciones diplomáticas de varios países.
El mandatario salvadoreño inicia un segundo mandato en el que la mayoría de los salvadoreños, si bien reconoce la mejora en seguridad, también demanda acciones que mejoren su capacidad adquisitiva, incremente la empleabilidad y brinde iguales oportunidades para nacionales y extranjeros.
“El Salvador cambió para siempre, nuestro Gobierno ya dio frutos, ya superamos lo más difícil, lo más urgente, ahora faltan todas las demás enfermedades, nadie lo niega”, concluyó el jefe de Estado.
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